Según fuentes del país norteamericano, el cambio climático está destruyendo su hábitat en el Océano Ártico y con ello reduciendo el número de especies en nuestro planeta a pasos agigantados
Entre las principales causas que explican que los osos polares estén en peligro de extinción es la gran contaminación que hay en todo el planeta, así como a los pesticidas que están expuestos. A esto hay que sumar que la grasa de las focas, su principal alimento, está llena de toxinas que finalmente acaban en su organismo. Lo que provoca todo esto es que sufran una gran cantidad de abortos, nazcan cachorros con muy poco peso y con un sistema inmunológico muy débil. Es decir, que los osos polares no solo están desapareciendo porque mueren, sino por que les cuesta reproducirse.
A todo el mundo no le ha parecido correcta esta medida. Varios expertos en políticas medioambientales del Heartland Institute, han tachado esta decisión de "alarmista" porque "aunque las temperaturas han aumentado en los últimos 10.000 años los osos polares no han desaparecido".
Los osos polares miden entre 2-3 metros de longitud y pueden llegar a pesar hasta 700 kilos dependiendo de su edad.Según los datos de WWF, solo quedan unos 20.000 osos polares en el mundo, de modo que convierte a los osos polares en una especie que puede desaparecer en el próximo siglo si continúa la tendencia actual de calentamiento en el Ártico.
La mayoría de estos ejemplares viven al oeste de Alaska, el norte de Alaska, Groenlandia y Siberia. Y aunque pueda parecer que están lejos de la contaminación de las ciudades y la civilización, se encuentran en claro peligro de desaparecer. Una triste noticia por todos los que amamos estos y otros tantos animales que no hacen otra cosa que intentar ser felices allá donde se encuentran.
La última re evaluación mundial de los osos polares realizada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) ha incluido a esta especie en la categoría de "vulnerables" en su Lista Roja de especies amenazadas.
La nueva re evaluación tuvo en cambio los cambios en la capa de hielos marinos, ya que el deshielo es la principal amenaza para su conservación y los resultados no han sido optimistas. Muy al contrario, se concluye que es muy probable que la población global de osos polares disminuya en más de un tercio en los próximos 35 a 40 años.